28.6.11

Mejoría en la esperanza de vida para los diabéticos tipo 1

Según un trabajo reciente presentado estos días en la Reunión Anual de la ADA en San Diego, las diferencias en la esperanza de vida entre las personas con diabetes tipo 1 (DM1) y la población general prácticamente han desaparecido. En concreto, la esperanza de vida para alguien con DM1 diagnosticada entre 1965 y 1980 era de 68,8 años, comparado con 72,4 años para la población general. Sin embargo, la expectativa de vida para una persona diagnosticada de DM1 entre 1950 y 1964 era de 53,4 años. Estos datos implican una mejoría de 15 años en la esperanza de vida de las personas con DM1 entre 1965 y 1980, mientras que la mejoría de la misma en la población general de los EEUU fue solamente de 1 año. Según el autor del trabajo, estos datos deberían servir de ayuda a las personas diabéticas que son injustamente penalizadas cuando intentan contratar un seguro de vida.

13.6.11

Suspendido el antidiabético oral Actos en Francia y Alemania

Las Agencias de medicamentos de estos países han suspendido la comercialización de pioglitazona (Actos®, Competact®) ante la posibilidad de que el medicamento incremente el riesgo de padecer cáncer de vejiga. Esta decisión sigue la estela de la retirada en Septiembre pasado (ver Noticias Médicas de 24-09-2010) de otro medicamento de la misma familia (rosiglitazona, Avandia®) por otro tipo de efectos secundarios. La decisión sobre pioglitazona ha sido comunicada a la Agencia Europea del Medicamento que tomará una decisión al respecto en su próxima reunión de 20 a 23 de Junio.

12.6.11

La hipoglucemia disminuye la productividad de los diabéticos

Un trabajo recientemente publicado, basado en una encuesta respondida en 4 países por 1404 adultos con diabetes, afirma que las hipoglucemias no severas generan unas pérdidas de productividad que podrían estimarse entre 15 y 93 dólares por evento, representando una pérdida de 8-16 horas de trabajo mensuales. Entre los que sufrieron alguna hipoglucemia durante el trabajo, casi el 20% faltaron a él durante una media de 10 horas. Casi la cuarta parte de los que habían tenido hipoglucemias fuera del trabajo (incluidas las nocturnas) llegaron tarde o faltaron el día completo al mismo. La pérdida de productividad fue más alta cuando las hipoglucemias no severas se producían por la noche. Los autores concluyen que hay que prestar mayor atención a las pautas de tratamiento que minimizan las hipoglucemias.